Tertulias Teológicas de Semana Santa - lunes
El Evangelio de Marcos a menudo contiene incidentes en pares que deben ser interpretados conjuntamente. En la secuencia de dichas narrativas los arcos de las historias entrelazadas vibran juntas, cada una proyectando su significado sobre la otra.
En la mañana del lunes de la Semana Mayor, Jesús regresó con sus discípulos a Jerusalén. En el camino, maldijo una higuera por no tener fruto a pesar de que no ser temporada de higos. Algunos eruditos creen que la maldición de la higuera fue una parábola que representaba el juicio de Dios sobre los líderes religiosos de Israel, quienes estaban espiritualmente muertos y quienes eran incapaces de producir frutos, demostrando así que la fe genuina es más que una religiosidad externa pues, según Marcos, la fe verdadera y viva es capaz de producir frutos espirituales a través de la vida cotidiana de las instituciones y personas que las profesan.
En esta tertulia, consideramos el desafió de profundizarnos en la comprensión de la narrativa de Marcos y entender cómo las dos historias, la de la higuera y la del templo, se aclaran mutuamente.